Las infecciones virales como el resfriado común o la gripe, son las causas principales de la mayoría de los dolores de garganta. Sin embargo, existen otros razones que también pueden ser factores desencadenantes:

• Alergias: las reacciones a elementos como el polen, los ácaros del polvo, el moho o las mascotas pueden hacer que la garganta se seque y se rasque, causando síntomas de faringitis.
• Amigdalitis: las amidgalas son dos dos pequeños bultos que se encuentran en la parte posterior de la garganta, cuya función es la de defender al cuerpo como primera línea de microorganismos que puedan entrar al ser inhalados o ingeridos.La amigdalitis ocurre cuando las amígdalas se infectan e inflaman.
• Reflujo ácido: hay personas con enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), una afección en la que los contenidos estomacales se devuelven desde el estómago hacia el esófago (tubo de deglución) que pueden sentir ardor y dolor en la garganta.
• Uso excesivo de la garganta: ese síntoma se puede desarrollar por tensar la garganta al gritar o por el consumo de alimentos picantes, por fumar o beber líquidos muy calientes.
• Contaminantes ambientales como el humo y los productos químicos también puede contribuir a una faringitis.
• Respiración por la boca: respirar por la boca en lugar de por la nariz al dormir es otra de las causas.

Es importante consultar al médico cuando el dolor de garganta dura más de una semana, empeora o está acompañado por síntomas como fiebre o inflamación de los ganglios linfáticos o cuando se presentan signos de alarma como: un sonido chirriante al inspirar (estridor), cualquier señal de dificultad respiratoria, babeo o voz apagada.

Para diagnosticar esta afección, el médico examinará el estado general de la garganta, la lengua y posiblemente los oídos. También puede realizar una prueba de estreptococos para descartar faringitis estreptocócica.

En cuanto al tratamiento de la faringitis, este consiste en abordar la causa subyacente. En caso de que sea por un resfriado, el profesional de la salud puede ordenar medicamentos de venta libre para aliviar los síntomas. Si se trata de una faringitis estreptocócica, puede recetar antibióticos para tratar la infección bacteriana y otros de los tratamientos del dolor de garganta pueden incluir: medicamentos antihistamínicos y antiácidos de venta libre.

Otras recomendaciones para aliviar el dolor de garganta son:

• Beber líquidos tibios como té con limón y miel o caldo o consomé.
• Chupar trocitos de hielo o paletas heladas 
• Use un humidificador o vaporizador
• Descansar la voz 
• Dormir bien
• Evita los elementos irritantes como el humo, las comidas picantes y los líquidos muy calientes

Se puede prevenir el dolor de garganta protegiéndonos contra los resfriados y la gripe, esto incluye, el lavado frecuente de manos, evitar contacto con personas que estornudan y tosen y vacunarse contra la gripe.