Lo normal en el comportamiento de un niño es que sea curioso e inquieto. Sin embargo, se ha vuelto frecuente que padres o profesores coloquen a los niños inquietos la etiqueta de hiperactivos y, en algunos casos, se termina relacionando con diagnósticos de TDAH o Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad. ¿Acaso ser inquieto no es una condición normal de los niños?
De hecho, algunas posturas indican que se está llegando a un sobrediagnóstico del TDAH y que se podría estar abusando de la medicación en niños; lo que ha generado gran controversia y división en la comunidad científica, clínica y educativa. Ante este panorama, es importante reflexionar acerca de la importancia de un diagnóstico basado en una evaluación neuropsicológica, realizada por profesionales idóneos como psicólogos clínicos, pediatras y/o neuropediatras.
Para entender un poco más sobre este tema y, en el marco del Día Internacional del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), en DoctorAkí consultamos diversas fuentes para contarte qué es, cuáles son sus síntomas y tratamiento.
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“El Déficit de Atención e Hiperactividad es un trastorno del desarrollo neurobiológico. Es decir, es un efecto que tiene el desarrollo de ciertas áreas de la corteza cerebral, durante el proceso de maduración que va a tener una implicación directa a nivel de comportamientos, de emociones y de pensamiento”, así lo explica Javier Clavijo, psicólogo clínico de la Universidad Pontificia Bolivariana, en una entrevista realizada en el programa Paso a paso, de Telemedellín.
El TDAH se encuentra descrito en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) y en la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10) realizada por la OMS.
La Clínica Mayo indica que este trastorno del desarrollo neurológico se caracteriza por la presencia de problemas persistentes como:
De acuerdo con la actualización del DSM-5, se amplió el rango de edad de 7 a 12 años para poder observar los síntomas y diagnosticar el trastorno. Además, los síntomas deben persistir durante más de 6 meses, en varios ambientes como familia, escuela, amigos; no en uno solo.
Javier Clavijo, psicólogo clínico de la Universidad Pontificia Bolivariana, señala que el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad se puede presentar por factores hereditarios. Y aclara que “es un trastorno de desarrollo biológico que tiene implicaciones conductuales. Más no es un trastorno de la conducta, es un trastorno propio del desarrollo”.
El TDAH también se asocia a factores ambientales y psicosociales, es decir, sus síntomas también dependen del entorno del niño. Además, a la exposición al cigarrillo, drogas y alcohol durante la gestación.
Ahora bien, la Academia Americana de Pediatría asegura que no hay evidencias que confirmen que el TDAH es causado por comer demasiada azúcar, aditivos de alimentos, alergias o vacunas.
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El Instituto Nacional de la Salud Mental, de Estados Unidos, expone que “una evaluación completa realizada por un profesional capacitado es la única manera de saber con seguridad si un niño padece de TDAH”.
“Lo ideal es que no se haga un diagnóstico antes de los 6 años”, indica Javier Clavijo, psicólogo clínico de la Universidad Pontificia Bolivariana, en la entrevista hecha en el programa paso a paso.
“Diagnosticar “al ojo” es irresponsable. Siempre tiene que haber una evaluación neuropsicológica. Por otro lado, no necesariamente, en todos los casos, se medica después de un diagnóstico, ya que las pautas de crianza o estrategias de acompañamiento con los padres pueden ayudar”, añade el experto.
El tratamiento para controlar los síntomas puede incluir terapias, medicinas o una combinación de ambos, según sea el caso. Ahora bien, existe un miedo de los padres frente a la medicación de los niños. Es por esto que el magíster en psicología clínica, Javier Clavijo, considera que dentro de las terapias es importante implementar estrategias de acompañamiento que entreguen herramientas a los padres y maestros.
“El medicamento actúa sobre lo biológico. Sin embargo, los comportamientos tienen una relación con lo social. Cómo aprende el niño a regular sus emociones, las conductas, a enfocarse, a canalizar la energía que tiene, es algo que aprende de sus padres y cuidadores”, añade Clavijo.
“El trabajo con la familia es muy importante. Siempre se buscará complementar las estrategias que se usan, y anular otras de tradición como la palmada, la chancleta; la idea es aplicar nuevas herramientas respetuosas con los niños”. Javier Clavijo, psicólogo clínico de la Universidad Pontificia Bolivariana
La Academia Americana de Pediatría también expone otras sugerencias para ayudar a un niño con TDAH:
Es normal que todos los niños muestren algunos comportamientos similares a los síntomas del TDAH de vez en cuando. Como dificultad de concentración, de seguir instrucciones y órdenes; de estar sentado más de diez minutos, muestras de impaciencia, o escasa tolerancia a la frustración. Finalmente, los niños atraviesan por diferentes etapas de desarrollo y niveles de maduración, según su edad.
De hecho, algunas veces un niño podría estar reaccionando al estrés en el colegio o en la casa, o tal vez estar aburrido, o teniendo unos días difíciles. Esto no significa que él o ella tenga TDAH, según la AAP.
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Generalmente, en el colegio, los profesores son quienes pueden notar la falta de atención, hiperactividad o impulsividad, y puede plantear estos síntomas a los padres, siempre y cuando se hayan manifestado con regularidad por más de 6 meses. Sin embargo, “también es clave revisar cómo está la estructura familiar, cómo se le habla al niño, cómo lo acompañan, cómo lo orientan, qué conocen del niño”, de acuerdo con el magíster en psicología clínica, Javier Clavijo.
Se recomienda consultar con un neuropediatra o psicólogo infantil para una evaluación integral, que nunca se debe limitar al listado del DSM-5; sino “también debe tener en cuenta los aspectos que confluyen en el niño: su desarrollo, contexto, procesos psicológicos, educación, entorno familiar, entorno escolar, conflictos, etc”, de acuerdo con el artículo ‘Sobrediagnóstico del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad: producto contextual o afinidad clínica’, publicado por Revista Psyconex, de la Universidad de Antioquia.
Esperamos que esta información sea de guía para ti si estás pasando por un momento difícil con tu niño, y tengas presente revisar primero qué está pasando en su día a día. ¡Ah! y recuerda que cuando se trata de bienestar en el blog de DoctorAkí pensamos en ti.
Publicado originalmente en julio de 2021.
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